viernes, 10 de abril de 2009

Cogreso Catalanista

El notario Alfons López Tena impulsa el 3º Congreso Catalanista después de que los dos anteriores se celebraran en los años 1880 y 1883. Las dos convocatorias fueron para fortalecer la necesidad de un catalanismo político enfrente del catalanismo cultural. Posteriormente, tuvo lugar también el Memorial de Greuges (1885), las Bases de Manresa (1892), elecciones de 1901 y Mancomunidad de Catalunya (1914). (e-Noticies)



El martes 3-2-09 el periódico la Vanguardia publicaba la siguiente carta firmada por el señor M.B.

“Congrés catalanista.”

“Quan vaig rebre l`avis de la celebració d`un congrés catalanista, el tercer de la história, vaig deixar-lo tot per anar-hi, perqué crec que el major defecte de la nostra política actual és la fragmentació en partits, sobretot en front de temes prioritaris, com és la nostra relació amb l`Estat espanyol, que ens té subjugats i explotats econòmicament, tema sense dubte el més prioritari de tost i davans del qual la protesta ha de ser unànime, deixant de banda tots aquells detalls que ens separen, formant un front comú amb una justa i gran protesta si volem que aquesta sigui presa seriosament.
El congrés catalanista es va celebrar a la sala de conferències de la Universitat Pompeu Fabra i va ser un èxit de públic, d`un pùblic que superava de molt la capacitat del local. Entre els assistents hi havia els nostres antics presidents de la Generalitat de Catalunya Jordi Pujol i Pascual Maragall i del Parlament de Catalunya Joan Rigol, que va fer la presentació.
Diferents parlamentaris catalans es referiren a punts diversos de la política catalana , destacant la intervenció d`Alfons López Tena, que es va referir a les possibilitast d`independència, i Josep Espar Ticó, que feu una llarga disertació sobre la història del catalanisme des del final de la Guerra Civil.
Tot plegat va estar molt bé , tot i que potser va faltar contundència en plantejar el problema de la unitat al que m`he referit al començament, però crec que aquest ès el camí.”


Traduzco:
Cuando recibí el aviso de la celebración de un congreso catalanista, el tercero de la historia, lo dejé todo para ir, porque creo que el mayor defecto de nuestra política actual es la fragmentación en partidos, sobre todo frente a temas prioritarios, como es nuestra relación con el Estado español, que nos tiene sojuzgados y explotados económicamente, sin duda el tema más prioritario de todos y delante del cual la protesta ha de ser unánime, dejando a un lado todos aquellos detalles que nos separan, formando un frente común en una justa y gran protesta si queremos que esta sea tomada con seriedad.
El congreso catalanista se celebró en la sala de conferencias de la Universidad Pompeu Fabra y fue un éxito de público, de un público que superaba en mucho la capacidad del local.
Entre los asistentes estaban nuestros antiguos presidentes de la Generalidad de Cataluña Jordi Pujol y Pascual Maragall y del Parlamento de Cataluña Joan Rigol, que hizo la presentación. Diferentes parlamentarios catalanes se refirieron a puntos diversos de la política catalana, destacando la intervención de Alfonso López Tena, que se refirió a las posibilidades de independencia, y Josep Espar Ticó, que hizo una larga disertación sobre la historia del catalanismo desde el final de la Guerra Civil.
Todo junto estuvo muy bien, todo y que posiblemente faltó contundencia en plantear el problema de la unidad al que me he referido al comienzo, pero creo que éste es el camino.


Después del brillante planteamiento, junto con el resumen del patriótico evento, por el patriota cuatribarrado y compañero de lucha M.B. puedo confirmar, porque yo estuve allí, que el acto transcurrió tal como él lo expone. Mi asistencia fue posible después de vencer una serie de contratiempos y dificultades variadas ocasionadas por el hecho de encontrarme a unos 1900 kilómetros de nuestra querida patria.
Un servidor de profesión lencero, especialidad lencería fina de señora, y vendedor de bulas cuatribarradas, bulero, en tiempo libre, estaba cumpliendo con su trabajo habitual en tierra extraña, pero la llamada de la patria para mí siempre tendrá prioridad indiscutible.
Viajé de un tirón por carreteras secundarías buscando atajos, y franquicias libres de peaje, para estar presente en tan magno acontecimiento fiel al principio cuatribarrado de amor verdadero: “Si tú me dices ven lo dejo todo....” . Cualquier otra noticia que difiera de lo apuntado por el compañero M. B. es errónea, por omisión o por intereses espurios españolistas manipuladores de la verdad absoluta que representa nuestra sagrada causa.
Sepan los españoles, que pululan por estos foros, que cuando reclamamos un partido único sin matices ideológicos ni mandangas disgregadoras lo hacemos por el bien del nacional socialismo cuatribarrado y de nuestra querida nación. (observen que en los escritos habituales referidos al pensamiento cuatribarrado la palabra nuestro, nuestra, nostra, etc. es la que mayor número de veces se utiliza posiblemente se trate de un índice del sentimiento posesivo, cerrado hacia el exterior, propio de localismos que temen la contaminación).


Además apoyamos nuestro proyecto unitario en los principios del pensamiento científico y del conocimiento derivado del mismo , en la racionalidad y la sistemática donde el orden y la coherencia ideológica son los pilares que sustentan el edificio de nuestro firme propósito de independencia. Nuestros lideres naturales entienden que solamente desde el método científico, tan utilizado en las ciencias experimentales, con la reproducibilidad como faro que guié el navío de la patria doliente, será posible alcanzar la meta sublime de la independencia nacional, separar el oro, Catalunya, de la ganga, España, tomando como modelo el camino horadado en las paginas de la historia por los grandes pioneros del método experimental: Observación- hipótesis – predicción- verificación- replicación.
Actualmente estamos en la fase de las hipótesis, intervención de Alfonso López Tena, ( observar ya lo hemos hecho durante trescientos años, confiamos en aumentar la velocidad en las fases venideras). ¿Qué pasaría si declaramos unilateralmente la independencia? ¿ Realmente somos mayoría los patriotas cuatribarrados capaces de asumir riesgos impredecibles?.......?.....?.....etc, etc. Las otras fases de momento es mejor no plantearlas, aunque, si la tierra sigue girando y no se produce un encontronazo con algún asteroide incontrolado, todo se andará nuestro tiempo político es comparable al geológico y trescientos años no son nada como cantaba Gardel en su famoso tango.
La voluntad de un pueblo con ansias de soberanía no hay fuerza ni humana ni cósmica capaz de pararla, y nosotros somos un solo pueblo, homogéneo étnica y racialmente, con alguna ligera incrustación indeseable que con el tiempo y paciencia iremos eliminando o incorporando, digiriendo individualidades y partículas extrañas, fagocitando anticuerpos, bacterias y virus contaminantes. Nuestro sistema educativo está diseñado para conseguir el éxito nacional a largo plazo.


Alguien puede extrañarse del abandono de la homilía patriótica, cuyo mayor representante es el Gran Honorable, a favor del método científico como herramienta de trabajo diario en pos de la independencia de Cataluña, pero los tiempos cambian y el principio de autoridad está en decadencia en todos los ordenes del comportamiento humano. La verdad no se deriva de la autoridad, el conocimiento es fruto ante todo de la experiencia. La homilía, desde San Gregorio, se ajusta a los criterios de los padres de la doctrina y el método de la ciencia sólo confronta ideas comprobadas. El sermón o exhortación parenética cuyos tiempos conoce extraordinariamente bien el Gran Honorable poco tiene que hacer frente a la metodología científica. Y cuando uno se ha pronunciado tan inequívocamente, como a menudo lo ha hecho el Gran Honorable, queda, creemos, casi inhabilitado para la objetividad. Y resulta objetivo,valga la redundancia, que lo primero que hacen los conquistadores es intentar que los pueblos vencidos pierdan la fe en sí mismos. El primer paso para la liberación es buscarla y recuperar el poder arrebatado. El poder que da el ser: el poder de decidir, el poder de hacer, el poder de ser libres. Tres siglos con la cabeza baja son más que suficientes. Ya ha llegado el tiempo de la autoestima, el tiempo del poder. (¡Música maestro!, ¡Música!).


Ya tenemos en cuenta que las discrepancias pueden aparecer en cualquier momento, no todo el mundo estará de acuerdo con nuestro planteamiento objetivo, pues hasta en hechos científicos indiscutibles, bajo la óptica de la razón pura y la experimentación más honesta, casi siempre aparecen rendijas por donde intenta penetrar el virus de la contradicción manejada muchas veces, aunque afortunadamente no siempre, por hábiles profesionales de la demagogia y el españolismo camuflado. Pongo un ejemplo al alcance de todos, incluidos los españoles, sacado de la práctica analítica ordinaria. Sin que nadie deba interpretar, tengo la conciencia muy tranquila, que con dicho ejemplo se pretende una comparación desafortunada entre el respetabilísimo sentimiento nacional y cualquier tipo de secreción humana o animal.
A veces la verdad se encuentra hasta en las excretas más primarias del ser humano, pongamos por ejemplo la orina. Liquido de color amarillo pálido, olor aromático peculiar, sabor salino y dulce en los diabéticos, los médicos de la medicina clásica diagnosticaban algunas enfermedades bebiendo a pequeños sorbos el mencionado licor, compuesto mayoritariamente por agua, sales minerales (cloruros, fosfatos, sulfatos y sus correspondientes cationes, sodio, potasio, calcio), sustancias orgánicas como la urea, creatinina, ácido úrico, y componentes menores, entre ellos algunas hormonas como la gonadotropina, y trazas de miles de otros compuestos hormonas y metabolitos, dependiendo de la salud personal fundamentalmente y del tipo de alimentación.


Tenemos, pues, un ente objetivo, la orina, si alguien quiere el nacionalismo identitario. Ahora bien, la posición de las diferentes personas ante el desecho animal y humano es notoriamente diferente, algunos pueblos antiguos como los galos utilizaban la orina para blanquearse los dientes, numerosas personas padecen uro fobia, quienes padecen esta fobia tienen miedo o una incontrolable vergüenza a orinar. Sin embargo, cuando la presión sobre las paredes de la vejiga se eleva por encima de un valor umbral entonces se desencadena un reflejo neurógeno llamado reflejo miccional que provoca la micción y la persona si no anda lista puede acabar mojándose en gran parte su ropa interior. ( aquí aparece parte del discurso que utilizo como lencero, cuando actúo como bulero saco a relucir los gloriosos iconos catalanistas y la necesidad recaudatoria para mantener viva la revolución pendiente ).

Otras personas atribuyen a la orina un alto poder terapéutico, orino terapia, y utilizan la orina, la suya y la ajena, como remedio universal. La orina ligada a los hábitos sexuales de alguna gente también es una realidad actual y histórica, la lluvia dorada y otros fenómenos atmosféricos. Neruda en el poema llamado “Tango del viudo” escribió: “ Y, por verte orinar, en la oscuridad, en el fondo de la casa, como vertiendo una miel delgada, trémula, argentina, obstinada, cuántas veces entregaría este coro de sombras que poseo, y el ruido de espadas inútiles que se oye en mi alma.....” Jonathan Swift el escritor satírico irlandés cuya obra principal “Los viajes de Gulliver” vivió obsesionado con el contraste entre la belleza del cuerpo y las horribles funciones corporales. En su poema más famoso, un amante explica por qué decidió abandonar a su amada: Nor wonder how I lost my wits; Oh! Celia, Celia, Celia shits (¡Oh! Celia, Celia, Celia defecas).
Sin embargo Gulliver salvó a la emperatriz de Lilliput de su palacio en llamas con una copiosa y espumosa meada. Cuentan las crónicas que el cáustico poeta Marcial se burlaba de un patricio, llamado Basso, que gustaba de beber en copa de cristal y en cambio evacuaba en orinal de oro. Carius ergo cacas, le recriminaba el poeta.

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